“En realidad no tengo el don de la ubicuidad”, dijo el presidente, Gustavo Petro, al explicar por qué canceló un evento con empresarios el año pasado. Pero en su primer año de gobierno sí ha practicado varias veces la desaparición.
Hace dos semanas, dijo que iría a San Andrés a celebrar el fallo del pleito limítrofe con Nicaragua. No llegó. Y este viernes dejó esperando a todos los alcaldes del área metropolitana de Bucaramanga, y luego no fue a un evento en el que iba a escuchar a 5.000 personas en Santander. La lista de plantados desde el 7 de agosto incluye a los magistrados de las altas cortes y a la cúpula de las Fuerzas Militares en la ceremonia de trasmisión de mando.
La Silla Vacía revisó la agenda presidencial de cada día desde la posesión de Petro. Encontró que ha cancelado o reprogramado 82 eventos desde el 7 de agosto. Para llegar a ese dato se contrastaron las agendas diarias enviadas por el chat de Presidencia, las notas de prensa que citan a los sectores a los que el presidente les incumplió, y se consultó a los involucrados en los casos en los que había dudas. En el ejercicio se cuentan como cancelaciones solo los eventos a los que Petro se comprometió a ir y luego no asistió, ya sea que los haya reprogramado o no. No se incluyeron las llegadas tarde.
Muchos casos tienen que ver justificaciones como el clima y la enfermedad, que han afectado también a otros presidentes. Pero el análisis muestra que en el caso de Petro la mayoría de cancelaciones obedecen a que el presidente entra en modo “agenda privada”. El término en los círculos de gobierno puede significar atender temas familiares, recibir reuniones políticas confidenciales, o cualquier otra actividad, y ayuda a no tener que dar explicaciones.
Los incumplimientos han generado ataques políticos, rumores y desinformación. Van desde problemas de consumo de sustancias, impulsadas por las mismas filtraciones de Benedetti, hasta afecciones de salud. Y se agitan más cada vez que Petro vuelve a ausentarse sin explicación clara.
Acá las conclusiones más importantes del análisis:
1. Petro cancela y entra en “agenda privada”
Al revisar los 82 eventos cancelados, en la mayoría no es claro qué hizo Petro en el tiempo en el que canceló su agenda. En 32 casos el presidente tuvo agenda privada en el momento de los eventos cancelados, casi una vez cada 10 días. Es decir, no los reemplazó por otros actos públicos, sino que se quedó en la Casa de Nariño o fuera de las cámaras.
Ese fue el caso de sus cancelaciones de este viernes en Bucaramanga, y también de la de San Andrés. En ambas Petro omitió las explicaciones.
En los casos en los que hay información, la mayoría de veces Petro cambió compromisos en su agenda por temas internos de gobierno o de seguridad. Así lo hizo el 30 de marzo de este año, cuando faltó a una cumbre sobre paz con Juan Manuel Santos y se quedó en la Casa de Nariño reunido con el ministro de Defensa.
La segunda razón de los cambios en la agenda han sido razones de fuerza mayor como enfermedad y problemas para trasladarse a los sitios. En ocho ocasiones de este año Petro ha cancelado eventos por enfermedad.
Pero algunas de esas explicaciones tienen contradicciones. Por ejemplo, el 14 de abril Petro faltó a la cumbre de alcaldes en Palmira. A la hora del evento, a las 3 pm, fuentes de Presidencia informaron que Petro no podría llegar por condiciones climáticas. Pero, desde las 6 am de ese día, por el chat de Presidencia habían informado que Petro iba a tener “agenda privada”. Es decir, desde la mañana había sacado el evento de Palmira de su agenda.
La razón de la cancelación, por lo tanto, fue otra. Y el presidente no quiso informarla.
2. Las cancelaciones han aumentado mientras avanza el gobierno
Los meses con más cancelaciones en la agenda de Petro han sido marzo y abril de 2023. En promedio, este año Petro ha cancelado nueve eventos por mes, sin contar julio por estar en curso. En 2022 el promedio fue la mitad: cinco cancelaciones por mes.
No todas las cancelaciones tienen el mismo impacto. Algunas, como las de este viernes en Bucaramanga, dejan a cientos de personas en un coliseo o una plaza esperando al presidente. Pero otras son reajustes en la agenda: como mover un consejo de ministros o un evento en una gira internacional al que Petro no alcanza a llegar.
La cantidad de cambios en la agenda muestra que no se trata de un tema de ajuste del gobierno en sus primeros meses. No hubo un cambio con la salida de Laura Sarabia, su jefa de despacho y la que manejaba su agenda. Petro faltó a 8 eventos en mayo, el último mes de Sarabia, y a la misma cantidad en junio, cuando ella salió del cargo por un escándalo.
3. A quienes más les incumple es a las comunidades y organizaciones sociales
El sector al que Petro le ha cancelado o reprogramado más eventos es el de las organizaciones civiles y sociales. En 17 ocasiones Petro no ha llegado a compromisos con estas. Entre los casos más visibles está su inasistencia a la cita con el consejo nacional de juventud en abril, y la cancelación de varias sesiones de “Gobierno escucha” en Ciénaga de Oro, Sevilla, y el último en Santander esta semana.
El hecho de que las más plantadas sean las comunidades, y que la razón la mayoría de veces sea la “agenda privada”, contradice la explicación que en su momento dio Laura Sarabia. En febrero, cuando aún manejaba la agenda, dijo que la agenda se retrasaba porque Petro quería escuchar a todos los sectores más tiempo del acordado.
“El presidente va más allá del tema protocolario. No existe que él diga ‘tengo solo dos horas para atender a tal comunidad’. Prefiere que el tiempo se use para que la gente de verdad se sienta escuchada, desde la comunidad en Cauca hasta el empresario que viene y resulta que tenía solo media hora, pero termina hablando dos horas con el presidente”, dijo Sarabia.
Los empresarios han sido justamente el segundo sector al que Petro le ha incumplido más citas, con 16 casos. Petro ha faltado sobre todo a congresos, como el Congreso Nacional de Comerciantes de Fenalco o la ceremonia del Premio del empresario del año. En varias ocasiones Petro ha delegado a su ministro de Comercio, Germán Umaña.
El tercer sector con más cambios de agenda es el de política exterior. Petro ha cancelado varios eventos en sus viajes internacionales, casi siempre por sobrecarga en la agenda, y también ha aplazado varias reuniones bilaterales en la Casa de Nariño con embajadores, como el de Emiratos Árabes el pasado 13 de junio.
4. El presidente incumple más la agenda hacia el final de la semana
El día con más cambios y cancelaciones en la agenda de Petro es el viernes. Una cuarta parte de todas las modificaciones de la agenda ocurrieron ese día. El segundo día es el jueves y el tercero es el miércoles. En general, Petro suele mantener su agenda en los primeros días de la semana y la modifica en los tres últimos.
La mayoría de las cancelaciones son cambios deliberados en la agenda y no retrasos en esta. Petro ha faltado a 16 eventos por retrasos en la agenda, mientras que ha dejado de estar en 33 por cambios de agenda, ya sea para atender otro compromiso o “agenda privada”. En 24 ocasiones la cancelación no ha tenido ninguna explicación, ni oficial ni extraoficial.
5. La prensa ha cubierto 6 de cada 10 incumplimientos
La fama de incumplido de Petro, además de estar soportada en los casos concretos en los que ha cancelado, también ha sido una constante en los medios. La prensa ha cubierto 56 de los 82 incumplimientos del presidente este año, en la mayoría de ocasiones en un tono crítico.
En 26 casos, sin embargo, los medios no han registrado el cambio en la agenda. Suele ser cuando hay una modificación para tratar temas internos de gobierno, que quedan fuera del radar de los medios. No se cubrió, por ejemplo, la inasistencia de Petro a la reunión de la Comisión Asesora de Relaciones Exteriores, el 10 de mayo. Petro designó al Canciller y atendió en su lugar el Aniversario del comando de las Fuerzas Militares.